viernes, septiembre 24, 2010

Peligroso deporte: balconing

Cada verano proliferan más en las zonas turísticas los accidentes producidos por el peligrosísimo deporte que practican algunos guiris locos y pasados de vueltas: balconing

Que yo sepa el balconing consiste en tirarse a la piscina desde la terraza de la habitación del hotel o ir saltando de terraza en terraza de las habitaciones, con el riesgo claro está de caerse y matarse. Normalmente los guiris, algunos de los cuales acaban matándose, están tan pasados de alcohol y/o drogas que no son conscientes del peligro que comporta este mal llamado deporte.

Es muy preocupante que el número de accidentes derivados de intentos de balconing fallidos esté creciendo año tras año. Este fenómeno se ve sobretodo en los hoteles de las Islas Baleares, la costa catalana y los hoteles de levante.

Por Internet circulan varios vídeos de inconscientes guiris tirándose a la piscina desde un primer, segundo o tercer piso... totalmente locos!!!

La verdad es que la euforia que deben tener estos turistas, por las substancias estupefacientes y alcohol, para tirarse por el balcón a la piscina debe ser impresionante. Se deben sentir invencibles, y al cabo de unos segundos acaban aplastados por el hormigón cercano a la piscina o por llegar a ella pero atravesarla hasta el fondo de forma excesica... al final el resultado es el mismo: lesión irreversible o la muerte.

Vigilen con el balconing que no somos Superman!

1 comentario:

Jafuda Cresques dijo...

Emeshing,

Nuestra guía en Croacia nos explicó que en Mostar, ciudad que debe el nombre a su puente, sólo hay un sitio donde uno puede tirarse al agua, ya que el fondo del río está lleno de piedras. Pues bien, el año pasado, un australiano decidió que eso de tirarse desde el puente debía estar muy bien... y lo hizo desde otro lugar, ocurriendo un fatal desenlace. Por otro lado, en Dubrovnik, también el año pasado fallecieron unas cuantas personas por caerse de sus murallas, a las que habían escalado para hacer fotos más bonitas: se ve que no sólo en Baleares algunos turistas carecen de sentido común...

Saludos,
Jafuda